viernes, 5 de septiembre de 2008


En sus teorías se definen y estudian los complejos de Inferioridad y Superioridad.
El primero considera la percepción de desarraigo que un individuo obtiene a causa de haber padecido una infancia mala, plena de burlas, sufrimientos, rechazos, etc. Respecto del Complejo de Superioridad, Adler considera que es la consecuencia del proceso de transferencia que busca esconder la inferioridad percibida, con la pretensión de ser superior a los demás, en algún aspecto vital. Podríamos decir, en términos de Jung, que la percepción de Superioridad es la consecuente reacción a un sentimiento de inferioridad no expresado externamente, maximizando hacia el exterior aquellos aspectos en que (por transferencia de objetos, o por observación diferencial) consideramos destacar del comportamiento colectivo aparente. Es una maximalización subjetiva del hecho sincrónico que nos lleva a buscar aquello que los demás consideran insólito, en nosotros mismos. Pero básicamente se manifiesta como una afectación de la personalidad que conduce a la adopción de posturas prepotentes o arrogantes, en nuestro trato con los demás. Siempre en la interpretación de las teorías Adlerianas.
En realidad, el síndrome de Superioridad es una consecuencia de un previoComplejo de inferioridad mal resuelto. Quien no siente la "inferioridad", no precisa exhibir su "superioridad"; por otra parte, quien es claramente superior, es así percibido por los demás, sin requerir una manifestación mayor.
Aunque un individuo puede exhibir comportamientos autoritarios y arrogantes, desarrollar actitudes de prepotencia, sin que constituya necesariamente un verdadero "Complejo de Superioridad" (empero una distorsión de la personalidad social del sujeto), por cuanto que no se produzca como consecuencia de una percepción previa de ser inferior en algo. Tal motivación debe quedar ciertamente esclarecida en el diagnóstico de las actitudes, a fin de evitar errores en la terapia asumida
-Encontré exactamente lo que quería explicar, que feo notar esto como un sindrome generalizado en la mayoría de los jóvenes.
En el primer año de psicología me dieron a éste psicologo, y a Jung. Adler me quedó con los complejos, cmo conllevan sentimientos inferiores y guardan un lazo íntimo a una necesidad de aceptación.
Jung, los arquetipos, enfrentarnos a nuestra parte oscura, a lo que no aceptamos...
no para sublimar, sino para aceptar,confrontar.

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